viernes, 27 de julio de 2018

W M Soberbia... ¿Decís?






Devolver las pelotas que me tiran;
no es pecado... Es cortesía. 

Cuando soberbia decís;
¿sabés, a qué os referís?
¿A  la tuya en presumir
de títulos sin postín?
Vergüenza os debiera dar,
¡si no sabés ni escribir!
¿Acaso vos piensa qué,
por tres versos publicar
sos del verso un adalid?
¡Vaya pena que me das!

Y te tratas a ti misma
como si fueses poeta,
eres tan solo una jeta
navegando en la marisma.
Tus letras no tienen prisma
¿No te dio por comparar
con los grandes tu versar?
Y comprobar que lo tuyo
es un miserable arruyo
indigno de publicar.

Criticar se te da bien,
mucho mejor que versar
eres maestra en juzgar
sin pensar, porqué y a quién.
¡Anda ya... ve y que te den!
Eres lengua venenosa
con envidia emponzoñosa,
destilando cruel veneno
contra lo poco de bueno
que luce color de rosa.

Y para ti y quien te siga
tan solo puedo decir;
sin ánimo de inducir,
que a mí me sopláis la higa.
Y no hace falta que diga
que eres mala de cojones,
que tus letras son borrones
carentes de fundamento,
que hasta ya se ríe el viento
de tus burdas pretensiones.

¿Qué con ser poeta sueñas?
¡Ve ya... y péinate las greñas!

------------------

Soberbia... ¿Decís?
con algún retoque.

Devolver las pelotas que me tiran;
no es pecado... Es cortesía. 

Cuando soberbia decís;
¿sabés, a qué os referís?
¿A la tuya en presumir
de humildad y de postín?
Vergüenza te debe dar,
¡si no sabes ni escribir!
¿Acaso te piensas qué,
por tres versos publicar
eres del verso adalid?
¡Vaya pena que me das!

Y te tratas a ti mismo
como si fueses poeta
y eres solo un pobre jeta
navegando en el abismo.
Tus letras rayan cinismo.
¿No te dio por comparar
con otros tu versear?
Y comprobar que lo tuyo
es un miserable arruyo
indigno de publicar.

Criticar se te da bien,
mucho mejor que rimar,
eres maestro en juzgar
sin pensar, porqué y a quién.
¡Anda ya... ve y que te den!
Eres lengua venenosa
con envidia emponzoñosa,
destilando cruel veneno
contra lo poco de bueno
que luce color de rosa.

Y para ti y quien te siga
tan solo puedo decir;
sin ánimo de inducir,
que a mí me sopláis la higa.
Y no hace falta que diga
que eres malo de cojones,
que tus letras son borrones
carentes de fundamento,
que hasta ya se ríe el viento
de tus burdas pretensiones.

¿Qué con ser poeta sueñas?
¡Anda a peinarte las greñas!





L Entre barbas anda la cosa Sonetillos De cuentos de la Gertrudis




Décima

¿Pelillos en el careto?
no hace falta ser lumbreras
ni ponerse anteojeras
para ver más bien un seto.
Debe haber miles maneras,
de poder sacar provecho
al hombre de pelo en pecho.
Pudiendo usar de felpudo
a todo bicho peludo
y no pecar de cohecho.


Sonetillos con estrambote

De barbas va la cosa

Nada tengo con la barba,
que también en la mujer
algunas suelen tener
si por lo bajo se escarba.

Y yo tengo buena barda,
el pelo es de agradecer,
disfruta el hombre a placer,
como burro sin albarda.

Alguna se lo depila,
¡sepa usté! ¿será quizás?
¡no tropiece la pilila!

No me importan las demás,
aunque sé que no se estila,
¡con pelo se goza más!

Y dicen quienes entienden
que según el entrecejo
así seguro estará
de bien poblado el conejo.


¡Cuánto sabes marinero!
¡Cierto lo del entrecejo,
es señal de si el conejo
se luce de gran plumero!

Y lo goza con esmero
tanto el joven como el viejo,
quien quiera siga el consejo
y no se afeite el trastero.

Mi viejo nunca se irrita
si encuentra en la sopa un pelo,
¡a veces hasta lo excita!

 Y me mira con recelo
mientras veo que levita
su pájaro que alza vuelo.

Y recuerdo con anhelo
lo que decía mi tía;
"Donde hay pelo... hay alegría".

jueves, 26 de julio de 2018

P M Todos a una. Romance







Ante gargantas que tiemblan
las palabras se marchitan,
ante sueños que no avanzan
ya ni el silencio nos grita
y ante un futuro que muere 
huye la razón rendida.

¿A dónde vas mundo cruel
hacia dónde te encaminas?

Ya no ondean las banderas,
hacia el suelo solo miran,
sienten la vergüenza ajena
ante un mundo que fusila
los sueños de libertad
de aquellos que sueñan vivan
los hombres en hermandad
bajo una misma consigna...

No veo vestir los lirios
aquel blancor de luz diurna
y dicen que se perdió
el resplandor de la luna.

Hasta perdieron el duende
aquellos cantes por rumba,
hoy son gritos lastimeros
como canto por mazurcas,
en esos salones rancios
de señores de altas cunas.

El verdor de la esperanza
parece la negra espuma
que mana el estercolero
cuando se prende la turba
ante el ataque de un sol
que con rayos la chamusca.

Las azucenas tiñeron
de rojo su blanca blusa
y el amor camina errante,
huyendo de la gentuza,
con lágrimas en los ojos
porque ya nadie le arrulla.

Buitres de curvados picos
y batallones de brujas
histéricas y atorrántes
se enzarzan en gran disputa
por comerse el corazón
una mañana en ayunas
de todas aquellas almas
que ya sin rumbo pululan.

Y la sombra de un jinete
asoma por la llanura,
es la muerte que  sonríe
mientras afila las uñas,
dispuesta a pasar al hombre
por su maldad la minuta,
que ya es hora de que pague
las injurias que fabula
contra el mundo oscurecido
por un sol que ya no alumbra.

¿Qué sucedió con el mundo?
¿Cuándo comenzó esta curda?
¿En qué maldito momento,
por qué razón tan difusa
el hombre en malo se torna
si al nacer es carne cruda?
Un blanco rayo de luz
sin señal de sombra alguna.

¿En qué extraño vericueto
el alma en cruel se permuta?
¿Qué misteriosos arcanos
nos convirtieron en chusma?
¿Y quién maneja esos hilos
que tanto el alma nos mudan?
Naciendo como nacemos
siendo puros sin fisuras?

¡Despierte el mundo al clamor
y empiece pronto la lucha
por salvar la humanidad
o se termina esta bulla!

El mundo se va a la mierda
si no lo salvan las musas,
ayudando a los poetas,
cargando de luz las plumas
rescatando la bondad,
luchando todos a una
para encontrar al amor
que se perdió entre la bruma.



domingo, 22 de julio de 2018

B W De la vida y su dureza. Soneto triste y coplillas del contrato







Harta ya de la vida y su dureza,
harta ya de vivir sin compañía,
ya no puedo luchar el día a día,
la insidia me venció con su aspereza.

¡Qué feliz quien no sabe de tristeza!
Por nunca yo gocé de una alegría,
fue mi caminar triste algarabía
por falta de tesón y de firmeza.

Debo reconocer que fui vencida,
y me ahoga un fugaz presentimiento;
¡Se mofó bien de mí, la puta vida!

Se tragó mi esperanza algún mal viento,
mi ilusión terminó siempre abatida,
¡Solo vi de la vida cruel tormento!

Y esto que aquí les cuento,
le suele suceder a mucha gente,
nacen para sufrir, vida inclemente.

Coplillas del contrato

Bien certera es esta estrofa,
no está fuera de lugar
y nadie la tome a mofa,
hoy para yacer con moza,
un contrato hay que firmar
o te cubrirás de broza.

Y yo en coplas te lo digo
un piropo es alborozo,
que puede mi buen amigo
el llevarte al calabozo.

Yo busqué mi maleficio,
por decirle a una ¡guapa!
Este martes tengo el juicio
y ni la Virgen me ampara.

viernes, 20 de julio de 2018

y A esa que nunca para.





Nos mira muy socarrona
 con  sonrisa vacilante, 
es la dueña del cotárro,
 a nadie pide permiso, 
se te puede llevar hoy 
o dejarlo pa´más tarde
y nadie se le resiste 
a nadie rinde estandarte.

Su cara como la cera 
color de piedra martirio,
luce brillante guadaña,
para segar cuando quiera,
pero en el fondo nos ama,
 con locura y con delirio
y es tan solo por amor 
que por llevarnos se cela.

De nada vale el rogar 
que de tu vida se olvide,
si quiere te dejará, 
hasta que aburras a un muerto,
pero sepas sin dudar, 
que te llevará pa´l huerto
y algunas veces quisieras 
con ella poder volar.

Por todo el mundo temida
por algunos muy buscada,
pero cuando planta cara
la cosa ya está perdida
de nada valen los llantos
ni las velas encendidas
ni el ir rogando a los santos
que la aparten de tu vida..

Nadie sabe en donde para, 
quizás en el inframundo,
si será cosa de Dios,
o el Demonio es quien la manda,
pero si parece ser 
que controla a todo el mundo.
Con fuerte puño de acero
sujeta bien la guadaña
dispuesta siempre a segar
aunque sea el trigo tierno.

Suele andar entre rosales 
y también entre la grama,
siempre de negra sotana 
y dos tibias como adorno,
días de fiesta no tiene, 
ni los domingos descansa,
cumple bien con su misión 
de llevar gente pa´l hoyo.

Suele acercarse a traición 
cuando viene a por su presa,
desde niños se la teme 
está presente en los sueños
y causa mucho respeto 
el saber que siempre acecha,
sobre todo cuando llega 
a nuestra vida el invierno.

Este canto le dedico
con mucho amor y ternura,
a ver si con cuatro versos
un poquillo la contento
y busca por otro sitio 
una fruta más madura
y a mí me deja tranquila,
que yo, de prisa... ninguna.

jueves, 19 de julio de 2018

W M B Don Pedro Muñoz Seca.






El mismo vídeo, declamado

Vos *Don Mendo preguntáis;
¡Porque a nadie más yo veo!
¿Y Don Pedro dónde está?
-Sus huesos en Paracuellos
y su alma volando va
por la inmensidad del cielo
pidiendo justicia a gritos
a quien le robó su cuerpo
mientras la alondra volaba
de madrugada en el cerro..

Un amanecer de otoño,
escupieron sus colmillos
seis negras bocas de lobo
sobre el cuerpo macilento
de un escritor de solera,
de las letras gran maestro;
Don Pedro Muñoz y Seca
el que dio vida a Don Mendo.

Malditos sean aquellos
que matan a los poetas,
y si existen los infiernos
los quemen en sus calderas.

Años fueron de terror
de una España decadente.
no tan solo las derechas
hicieron sangrar las fuentes,
fusiles de boca roja
también escupieron muerte,
también mataron las letras
que pensaban diferente.

Don Pedro pluma de pro
la encontró mirando al cielo,
le fue la vida segada
a tres meses, poco más
del poeta de Granada.

¿Qué diferencia señores,
distingue tanto a los muertos?
Al de Granada laureles
y para Don Pedro, nada,
ni tan solo un crisantemo
por no saber donde para.

No siempre escribe la historia
aquél que dicen que gana.

Malditos sean aquellos
que matan a los poetas
y si es cierto que hay un cielo
les cierre todas las puertas.


A Don Pedro Muñoz Seca. 
¡Asesinado!
Poeta y Dramaturgo español
Fusilado en Paracuellos del Jarama,
 el 28 de noviembre de 1936 (A la edad de 57 años)
Su cuerpo yace en una fosa común en Paracuellos.

Poema de Mercedes Bou Ibáñez

y Antonio Muñoz Mancebo


miércoles, 18 de julio de 2018

Coplas a mi mala suerte I




A la mala suerte I

Esta vida ya me cansa,
con prisa pasa, con prisa
y me pregunto ¿por qué?
¿Nunca para en mi cornisa?

Y yo por siempre la vi
que no muy lejos si pasa,
por la puerta del vecino
que ni labura ni amasa.

En su puerta si se para
y le da un beso en la boca,
y mi vecino sonríe
mientras yo me vuelvo loca. 

Unos gozan el vivir
otros arrastran su duelo,
pero mi sufrir no acaba
por mucho que a Dios apelo.

¿Qué pecado cometí?
¿Por qué se ceba conmigo?
¡Yo nunca pedí nacer,
a Dios pongo por testigo!

Yo nací con mala suerte,
nací con malos arcanos,
seguro que monto un circo
y me crecen los enanos.

Unos nacen para flor,
otros cardos borriqueros,
unos como reyes viven
otros en estercoleros.

Yo nací para el serón
lo de burra bien me pega
mientras que pasa la vida
y a mi balcón no se llega.

Quise en alguna ocasión
trepar un poco más alto,
pero siempre me esmorré
por no calibrar el salto.

Y no falta quien dirá
que todos somos hermanos
pero si te ven caer
nadie tenderá sus manos.

Y sueño con que algún día
quizás esto cambiará,
la tortilla 
dará vuelta ,
¡pero a mí… me aplastará!

lunes, 16 de julio de 2018

L De las vidas sin amor. Soneto triste






Mi débil corazón hoy yace inerte,
otrora destacó por su fiereza
y hoy tengo que admitir y con crudeza
que sin amor, la vida es solo muerte.

Al día en noche el alma lo convierte
si se vive sumido en la tristeza,
te acogota por siempre la pereza
si tu vida la entregas a la suerte.

 Las vidas sin amor pronto marchitan,
los sueños no se forjan y perecen
y las almas en llanto desgañitan.

Las gentes sin amores nunca crecen,
la ilusión por vivir al alma quitan
jardines que sin rosas desmerecen.

Vidas que al vicio vencen
dedicando al amor todos sus días,
gozarán la vejez con alegrías.

jueves, 12 de julio de 2018

B W M ¡Qué grande eres Maestro! A Serrat












Vídeo declamado




Retocada la voz


A fresas con miel me saben tus letras,
bastión por demás de buena poesía,
palabras de amor sencillas y tiernas
llenaron de luz mis más negros días.


¡Y qué grande eres Serrat
y qué grandes son tus letras!

A mi recuerdo se viene
el barquito de papel
navegando por los mares
de los charcos que al llover
se formaban en las calles
de aquel tu pueblo tan blanco
donde pasó tu niñez.

Y esa mágica utopía 
que huyó del mundo cabal
perseguida por los perros
y aquellas letras bonitas
para el campesino aquel
que dices nació en España 
y se llamaba Manuel.

Tus historias de vampiros
y de niños del Brasil
que se mueren por los tiros
de tanta perversión cruel
que siempre culpa a los niños
del milagro de nacer.

Tus versos a esa mujer
que también sin margaritas
puede en el amor creer
llevan de ti la grandeza
de hombres como tío Alberto
que ayudaron a crecer
los sueños de quienes sueñan
con mundos de amor y miel.

Y esos versos a Lucía,
la mujer hecha pasión,
es la historia más bonita
grabada en el corazón
de quienes sueñan y gozan
con las cosas del amor.

Y Penélope soñando
con su amor por esos mares,
luchando con la ilusión
por el verlo regresar
mientras lloraba tejiendo
en su banco frente al mar.

Tus letras que nos hablaban
de muñecas de cartón
con sus vestidos de novias
y zapatos de charol
esperando que algún loco
las cubriera de pasión.

Y ese mar del que contabas
que iba besando tu aldea,
y perfumando tus playas
con su saborcito a brea,
ese mar que fue testigo
de sueños y de quimeras
de navegantes con brío
luchando con sus mareas.

Y de aquel Currillo El Palmo
pasando noches en vela 
por culpa de Merceditas
la del tablao del Lucio
un chiringo en las afueras,
mientras soñaba el garrulo
con irse a pegar dos vueltas
en el carrusel del Furo
que anunciaba en los carteles;
¡Dos billetes por un duro!

De vez en cuando la vida
ilumina nuestros días
con poetas como tú
que nos encienden la piel
como a la piel de manzana 
de la niña que a las diez
 ya debe estar en la cama.

Y esa balada en otoño
que pone pelos de punta
a todo aquel que la escucha
sentado junto al hogar
mientras la nieve marchita
aquellas sienes tan blancas
de aquella Tieta al andar
caminito del despacho
del abogado gandul
que la quiso camelar.

Y al escuchar tus canciones
a la orilla de tu mar,
yo sueño también un día 
irme a vagabundear
como hiciera ese Quijote,
sin peto y sin espaldar
que León Felipe creó
para que tú con tu voz
volvieras a levantar
los sueños del caballero
en su errante galopar.

Y aquella casita blanca
abrevadero de amores
donde saciaban la sed
los ministros y doctores
de la baja sociedad.

Y aquel hijo que perdió
el regreso hasta su hogar
en el que mamá esperaba
un soneto que pudiera
llenar el hueco que dejan
los hijos cuando se van.

Y esa saeta que canta
el Machado en su versar
a ese cristo que se duele
ante el látigo que muele
sus lomos al caminar.

Esa cruz sobre los hombros,
esos ojos suplicantes
pidiendo a Dios por los hombres
muriendo para sembrar
los corazones de amor
y el perdón a los demás.

¡Qué grande, grande Machado!
y grande, grande Serrat,
Y los dos me conmovieron
con tan hermoso cantar.

Y muchas historias más
que me quedo sin contar,
¡Qué grandeza tu cantar!
¡Enorme y grande Serrat!

 Y ya tan solo maestro
embargada de emoción
te ofrezco un ramo de rosas
por esas pequeñas cosas
que llenan el corazón.

Referencias en el poema 
a estas canciones de Serrat:

Palabras de amor
Barquito de papel
Pueblo blanco
Mi niñez
Utopía
Le llamaban Manuel
De vampiros y vampiresas
Niño silvestre (niños de Brasil)
La mujer que yo quiero
Tío Alberto
Lucía
Penélope
De cartón piedra
Mediterráneo 
Curro el Palmo
El carrusel del Furo
De vez en cuando la vida
Piel de manzana
Balada de otoño
La Tieta
Vagabundear
Vencidos
La casita blanca
Soneto a mamá
La saeta
Aquellas pequeñas cosas