jueves, 4 de enero de 2018

X Tal como me doy


Mis libros de venta en lulu.com
sección biblioteca Mercedes Bou Ibáñez.
Se pueden visualizar las primeras 11 páginas.





Tal como me doy

Si ha de venir a buscarme me venga por lo derecho,
que he de partirme yo el pecho si es de usted necesitarme.
Que nunca supe negarme a quien vino a por ayuda,
no tenga la menor duda de que haré lo que pudiere,
así aunque en ello me fuere el darle mi propia muda.

Siempre fui bastante pobre, no conocí la riqueza,
que siempre tuve pereza de pelear por un cobre.
Que lo importante es que sobre en el corazón bonanza,
sabiendo dar esperanza a quien ayuda precise,
sin que nadie le requise su lugar en esta danza.

Hay que atender la razón, esa que del alma sale,
que no por rico más vale quien nació para melón.
Hay quien arrastra el serón hasta el día en que se muere
y llenarlo de oro quiere a costa de los demás,
sin importarle quizás el llanto que produjere.

 Pobre nací y pobre sigo, ser rica nunca soñé,
yo mi riqueza encontré gozando de un buen amigo.
Bien que sé y fuerte lo digo; "vivir para trabajar
sin tiempo de disfrutar, con afán de hacerse rico",
es un pensar de borrico que nunca podrá volar.

Mis amistades escojo a golpe de gorda lupa,
lo feo no preocupa, mas solo le abro el cerrojo
a quien viene sin matojo para ocultar un disfraz,
que lleve limpia la faz y el alma sin media suela
que a mí ya no me la cuela lo humilde como antifaz.

 Sabiendo ya como soy quien quiera puede quedarse,
nadie pretenda colarse, que pronto cuenta me doy.
Aprovecho a decir hoy que me sudan los ovarios
que sean pocos o varios quienes mis letrillas lean
y me da igual que lo crean, que yo no busco gregarios.



Si ha de venir a buscarme
me venga por lo derecho,
que he de partirme yo el pecho
si es de usted necesitarme.
Que nunca supe negarme
a quien vino por ayuda
y no le quepa la duda
de que haré lo que pudiere,
así aunque en ello me fuere
el darle mi propia muda.

De siempre, que fui yo pobre,
no conocí la riqueza,
de siempre tuve pereza
de pelear por un cobre.
Que lo importante es que sobre
en el corazón bonanza,
sabiendo dar esperanza
a quien ayuda precise,
sin que nadie le requise
su lugar en esta danza.

Hay que atender la razón,
esa que del alma sale,
que no por rico más vale
quien nació para melón.
Hay quien arrastra el serón
hasta el día en que se muere
y llenarlo de oro quiere
a costa de los demás,
sin importarle quizás
el llanto que produjere.

 Pobre nací y pobre sigo,
ser rica nunca soñé,
yo mi riqueza encontré
gozando de un buen amigo.
Bien que sé y fuerte lo digo
vivir para trabajar
sin tiempo de disfrutar
con afán de hacerse rico,
es un pensar de borrico
que nunca podrá volar.

A mis amigos escojo 
a golpe de gorda lupa,
lo amable no preocupa
y solo le abro el cerrojo
a quien viene sin matojo
para ocultar un disfraz,
que lleve limpia la faz
y el alma sin media suela
que a mí ya no me la cuela
lo humilde como antifaz.

 Sabiendo ya como soy
quien quiera puede quedarse,
nadie pretenda colarse,
que pronto cuenta me doy.
Aprovecho a decir hoy
que me sudan los ovarios
que sean pocos o varios
quienes mis letrillas lean
y me da igual que lo crean
que yo no busco gregarios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario