domingo, 9 de septiembre de 2018

Décimas III




Y de lo que me quieras comprar,
no son ocho, que son nueve,
antes de fichar se debe
el formato asegurar.
Y de ese modo lograr
que nunca el tren descarrile
y sus vagones apile
listos para la chatarra.
Para que siga la farra
que la pluma bien se afile.

Y quedé como una mema
a falta de un buen regaño,
por pretender con engaño
presumir con este tema.
Hacer un pastel de crema
y que salga bien goloso,
buena vista y bien sabroso
sin poner nada de azucar,
solo con agua del Jucar
y dos horas de reposo.

Con la ilusión del viajero
salí de mi casa un día,
la ilusión en mí bullía
cual cochino sin chiquero.
Me sentí como barquero
que no repara en banderas,
sin temor a las barreras
que corten su navegar.
¡El hombre debe luchar,
para extinguir las fronteras!

Que el tiempo se pasa en nada,
algo por todos sabido,
nada vale lo vivido
si no te llevas tajada.
La vida es una chingada
y el tiempo es un mal amigo,
muy mal se portó conmigo
siempre dispuse de poco,
por mucho que le di al coco
no tuve con él abrigo.

Y con su arrullo marino
mi cabello acariciaba,
me sentí Reina de Saba
ante aquel rostro cetrino.
Gocé del favor divino...
Apolo para mi sola,
En la cresta de una ola
mi ego se balanceaba.
Y de envidia suspiraba
una hermosa caracola..

Que te den sopa con honda,
mejor a ti, mi buen mozo,
parece tu boca un pozo
y tu lengua una anaconda.
Hoy me pillaste cachonda
pero en ti nada persigo,
escucha pues que te digo
bien claro y no me amilano;
vete a tomar por el ano...
que ha de gustarte mi amigo.​

Y nos regala el honor
amigo con su poema,
bien supo seguir el tema
en su máximo esplendor.
Y le pido por favor
que no decaiga la fiesta,
si hace falta pondré orquesta
chuletones y buen vino.
¡Qué nadie se haga el mohino
sáquenle brillo a la testa!

Las personas más neuróticas
no por ello han de ser feas,
que aunque tú no te lo creas
algunas son bien exóticas.
Mas prefiero yo las góticas
si me dejan escoger,
pues según mi parecer;
estas son, tan solo raras,
las otras precisan varas
pa´ poderlas convencer.

Y directo al cementerio
sin pasar por la capilla,
llevaron a la parrilla
a mi primo el Emeterio.
Y se enfadó el Eleuterio,
que quiso capar al cura,
¡si no es por la tía Pura
que le quitó la tijera,
salvando de esa manera
los huevos de la criatura.

Son almas puras y bellas,
las almas de los poetas
viven sus mentes inquietas.
sus palabras hacen mellas.
Nos acercan las estrellas.
preñandonos de emoción,
nos transmiten su pasión
con ese su bello canto,
que nos cubre con su manto
abrigando el corazón.

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