jueves, 16 de julio de 2020

W M De cuentos y poetas Sátira








Dicen que hubo alguna vez,
en tiempos lejanos ya
un sabihondo indiscreto,
que con ganas de jugar
tomó de una mona un feto,
y se puso a investigar
pa´ ver de encontrar el modo
de crear un buen esclavo
para él ya no hincar el codo.
Y amigo, no se me asombre
que de estos experimentos
nos dicen que nació el hombre.

Si los cuentos fuesen ciertos
yo siempre quisiera ser
una bruja de alquiler
pa´ despertar a los muertos.
Escondida por los huertos
acechar a Cenicienta,
dar marihuana por menta
y hacerme amiga del lobo,
buscar al  cerdito bobo
para ponerlo a la venta,
hacer con él la matanza
para llenar bien la panza
pues es lo único que cuenta.

Yo me imagino cual loba
despanzurrando corderos
y a todos los peloteros
que solo saben dar coba.
De bruja guardo la escoba
pa´ salir volando un día
buscando otra cofradía
aunque con menos tumulto
pero le rinda más culto
a la sufrida poesía.

Pa´ llegar a todo el mundo
al ponernos a escribir
hay que intentar transmitir
un sentimiento profundo.
Mi buen amigo Facundo
con las perras que ganó
una casa se compró
con un buen sótano incluido
ya que desde allí recluido
su sentir es más profundo.

Es faro la poesía
que siempre guió mi paso,
a las normas no hago caso
ni uso a nadie como guía.
Como siempre cada día
les transmito mi sentir,
e intento hacer sonreír
con mi versear prolijo,
que como alguien ya me dijo;
los versos bien sé parir.

No existen los versos presos
si sabes hacerlos fluir,
con el rimar y medir
volaran por universos.
Para que te queden tersos
si no te gusta la norma
ni meter letras en horma,
muy fino tendrás que hilar,
para así poder lograr
a los versos darles forma.

Y nadie debe envidiar
a poetas de altos cuellos,
que si poetas son ellos
tú también lo has de lograr.
Cada quien debe plasmar
los sentimientos que salen
de su alma para que calen
dejando un hondo sentir
en toda el alma que intente
buscar en versos simiente
que haga grato su vivir.

Como una palabra justa,
lo de sastres bien les queda
a quienes cortan la prosa,
(usando mal las tijeras)
para que parezcan versos
y solo son rayas sueltas
que hasta dan dolor de ojos
al ver que no se respeta
el cortar por donde tocan
las frases para que tengan
a simple golpe de vista
una bonita apariencia.

Si un día he de marchar,
lo haré desnuda,
como los hijos del mar,
los vientos del nuevo rumbo,
ellos me vestirán....

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